La cetoacidosis diabética (CAD) es la forma de debut de casi el 30% de los diabéticos. Es una patología grave que requiere un manejo minucioso, siendo necesario realizar numerosos cálculos tanto para ajustar los requerimientos hídricos del paciente como para preparar sueros específicos con diferentes concentraciones de iones. Esto puede incrementar el riesgo de cometer errores, lo que unido a la necesidad de una monitorización estrecha por las potenciales graves complicaciones (edema cerebral, arritmias por hipopotasemia, etc.), hace que en numerosos hospitales, los pacientes sean ingresados en la unidad de cuidados intensivos pediátricos (UCIP). Sin embargo, en centros hospitalarios que carecen de UCIP, estos pacientes deben ser manejados en la planta de hospitalización, lo que no consideramos un inconveniente para sutratamiento. Hemos elaborado un protocolo con el objetivo fundamental de tener que realizar el menor número posible de cálculos, minimizando tanto el estrés que conlleva la situación como los posibles errores que podrían cometerse.